Acné y secuelas

Hasta el momento se desconoce por qué algunas personas padecen acné y otras no. El papel que juega la herencia no está bien determinado. Si bien sabemos que un padre con acné severo tiene más posibilidades de tener un hijo adolescente con acné; esto no se cumplirá obligatoriamente. Se conoce que el acné es una enfermedad compleja con 4 factores involucrados en su aparición:

1. Seborrea por estímulo hormonal :

La hormona más importante involucrada en el acné es la testosterona. Esta hormona, producida por hombres y mujeres (estas últimas en pequeñas cantidades) tiene receptores en la glándulas sebáceas. Esta hormona estimula las glándulas sebáceas agrandándolas y haciéndolas producir más grasa. Las personas con predisposición a presentar acné tienen receptores con mayor actividad. Esto explica que muchas veces a pesar de tener una cantidad normal de testosterona en la sangre, el efecto de la hormona es mayor en la piel produciendo un acné muy intenso.

2. Obstrucción del conducto de salida de la glándula sebácea

La glándula sebácea tiene un conducto que lleva su contenido al exterior de la piel. En el acné se produce un taponamiento de este conducto con sebo y células desprendidas. La glándula taponada empieza a crecer y a inflamarse produciendo comedones (puntos negros y blancos) y luego granitos rojos y con pus. La testosterona también contribuye a producir el taponamiento del conducto sebáceo, por ello cuando se dan anticonceptivos orales con estrógenos disminuyen las lesiones de acné.

3. Existencia de microorganismos en la glándula sebácea

El microorganismo más importante en el acné se llama Propinebacterium Acnes. Este germen produce inflamación en la glándula sebácea y empeora el acné.

4. Inflamación

La inflamación ocasionada tanto por el taponamiento de la glándula como por los microorganismos puede romper la pared del folículo pilosebáceo empeorando las lesiones del acné.

En el último consenso de Mayo del 2009 de la entidad internacional que revisa el tema del acné en EEUU llamada la Global Alliance, se determina que el acné es una enfermedad crónica que tiene periodos de exacerbación y otros de remisión.

El 80% de los pacientes pueden controlar su acné alrededor de los 30 años y un 20% pueden seguir teniendo acné en sus 40s e incluso 50s.

Ya que el acné es una enfermedad crónica el objetivo de su tratamiento es controlarla al máximo evitando los períodos de exacerbación, logrando así que el paciente este el mayor tiempo sin lesiones de acné. Con esto conseguiremos disminuir las secuelas tipo cicatrices y manchas.

• «El acné es causado por una higiene deficiente»

Totalmente falso. Si usted cree este mito y lava su rostro en forma frecuente e intensa puede irritar su piel y empeorar su acné. Lo recomendable es lavar su rostro solo 2 a 3 veces al día con un jabón suave. Si su piel es muy grasosa se podría indicar un jabón especial para controlar la gratitud de la piel, sin embargo cuando se utilizan cremas para el acné por la noche es mejor utilizar un jabón suave (que ya se le ha indicado).

• «El acné es causado por la dieta»

Ni el chocolate, ni las grasas producen acné. No existe evidencia científica que muestre que algún alimento ocasione acné. Sin embargo, si el paciente nota que alguna comida exacerba su acné deberá evitar consumirla. Se le recomienda llevar una dieta balanceada sin excesos.

• «El acné es solo una enfermedad cosmética»

Nada más falso, ya que el acné afecta la calidad de vida de las personas produciendo problemas que van desde una pobre autoestima hasta cicatrices permanentes.

• «No hagas nada, solito se te va a pasar».

Este arcaico concepto dejó de tener validez desde que los tratamientos dermatológicos lograron controlar rápidamente las lesiones de acné evitando una condición incómoda y potencialmente desfigurante.

• «La actividad sexual mejora o empeora el acné».

Nada tiene que ver la actividad sexual con el acné.

• Use sus medicamentos tal y como se lo ha prescrito su dermatólogo.
• Pare de usar tratamientos no indicados por su dermatólogo pues podrían irritar su piel y exacerbar su acné (como los productos que venden por televisión, productos naturistas, productos por catálogo, etc….)
• No deje manipular su acné por cosmetólogas, «cosmeatras» u otro personal no Médico.
• Evite productos que irriten su piel como jabones y cremas abrasivas, astringentes, mascarillas. La irritación empeorará su acné y le será difícil tolerar su medicación.
• Converse siempre con su dermatólogo. Pregúntele todo lo que no entendió bien. Si usted no comprende el tratamiento, no podrá seguirlo. En sus controles mensuales informe a su dermatólogo todos los aspectos buenos y malos del tratamiento, solo así podremos encontrar el mejor tratamiento para su acné.
• Nunca se pellizque, pinche o manipule un granito de acné. Lo único que conseguirá será una inflamación mayor y una probable mancha o cicatriz.
• Espere 15 minutos después de lavar su rostro para aplicarse la medicación. Aplicarse un medicamento inmediatamente después de lavarse el rostro puede irritar su piel porque la piel húmeda absorbe más.
• Use productos para la piel y el cabello que sean «oil free» o «libres de grasa». La grasa de los productos cosméticos puede tapar sus poros y empeorar su acné. Busque productos que tengan una etiqueta que diga «no comedogénico», «no acnogénico» u «oil free».

Algunas veces el paciente con acné requiere tratamientos complementarios para lograr una mejoría más rápida y disminuir así el riesgo de cicatrices definitivas. Estos procedimientos son parte del tratamiento global y el paciente deberá continuar con su tratamiento dermatológico tópico o vía oral. Algunos de los tratamientos se mencionan a continuación, si usted está interesado en alguno consulte con su dermatólogo sobre el correcto momento donde deben de ser utilizados.

• Limpieza facial con extracción de comedones
• Peeling químico
• Microdermoabrasión
• Toxina Botulínica: Botox, Siax
• Liquid Face Lift
• Trio XT Skin Tightener
• Elight Nuevo!